¿Cuál es su valoración de Expoliva (Feria Internacional de Aceite de Oliva e Industrias afines) como catalizador e impulsor de relaciones y operaciones comerciales?
Expoliva ha sido desde su primera edición una de las más importantes citas profesionales del sector oleícola, seguramente la más importante. Pero es que además, en el actual contexto de expansión internacional de muchas de las empresas suministradoras del sector y de cada año más productores de aceite de oliva, Expoliva ha sabido atraer a visitantes de todo el mundo, ha sabido internacionalizarse y eso la ha convertido en un encuentro imprescindible. Es más, sino duda ha sido fundamental en la detección de oportunidades en mercados internacionales para nosotros como suministradores.
¿La actual edición es la número XVIII, que circunstancias o servicios ha echado en falta en otras ediciones?
La organización de la feria es muy buena, y los jienenses pueden presumir de IFEJA, unas instalaciones con las que no cuentan ciudades de mayor tamaño. La coordinación con los expositores, contenidos del simposio y la difusión de la feria mejora cada año. Sin embargo, Expoliva ha ido creciendo, como decía, de forma que ahora los visitantes de Jaén provincia y limítrofes siguen haciendo en su mayoría visita sin pernoctación en Jaén, pero la enorme afluencia de visitantes y expositores del resto de España e internacionales desborda en cada edición más claramente a Jaén.
¿Cuál, en su opinión, es el contexto actual del sector de cara a la celebración en mayo del citado evento?
El sector oleícola se encuentra en general en un buen momento, pero se enfrenta también a retos muy importantes. Los productores de aceite de oliva están respondiendo a estos retos.
Por un lado, los nuevos cultivos están afectando definitivamente al coste de producción, e impulsa otras vías de reducción del coste como pueden ser la agregación de cooperativas o la optimización en la gestión de las grandes almazaras. Por otro, en los últimos años son muchos los productores que han apostado por la más alta calidad, el valor añadido y la internacionalización.
En este sentido, Expoliva es el escaparate en el que los aceites se visten de gala, y las industrias afines muestran sus soluciones ante los retos actuales.
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